Los individuos, las familia, las sociedades y el mundo se enferman con cargas emocionales, desaliento, y desesperanzas, que conducen a pensar y obrar mal. Las limitaciones en la vida pueden generar cargas; que no siempre son entendidas. No es posible evitar el recuerdo de lo pasado, aunque lo que pasó, pasó, quedan huellas que afectan la vida presente. No siempre la gente toma su pasado como referenencia para nuevas perspectivas de vida, sino que en ocaciones atrapa y condena.
http://elmundosingularderocio.blogspot.com/2012/04/el-cerebro-tiene-sexo.html
Se requiere de una higiene mental, donde los pensamientos desagradables sean sustituidos por los buenos, justos y amables.
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